- Oye paaapa..., necesito un reló...
- Pa' que quiere un reló m'hijo...? en el campo ni falta que hace, pué...!
- No paaapa, no...; lo quiero pa cuando salgo por las noches con la Maaarta...
- Pero hiiiijo, tu sabes que puedes leer la hora en los luceros de la noooche...!
- No
paaapa, no...! Miiire, en las noches questán estrelladas, caminamo de
la mano, oigo los grillos, oigo como las plantas se mueven con el
viento... La Maaarta huele a jabon y yerbas silveeestre... Tooonses
nos sentamo a la oriya'el rio, paaapa...! La empiezo a besar... le
acaricio su carita, sus hombros, paaapa..! Tonces rodamos por la
yeerba paaapa...! Quito su ropa, su taaanga, todito paapa...! nos
quedamo en cuero', paaapa, y ya cuando la luna ilumina su cuerpo, me
subo encima d'eya, la beso en el cueyo...; ella respira juerte, gime, se
queja, jadea y tonce me dice... 'damelaooora...!, Juan....damelaooora...!
Y yooo, yo sin reló, paaapa...!
creo que necesita algo más que un reloj, muy bueno jajajja.
ResponderEliminar¿Y el campanario de la iglesia para qué está? digo yo
ResponderEliminarBesos
un abbraccio...ciao
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