Mi padre fué para mi, como supongo que para la gran mayoría lo es su padre, el hombre del que he aprendido casi todos los valores importantes de mi vida.
Hoy hace ya quince años que se fué, víctima del maldito cáncer. Solo oir el nombre de esa enfermedad me hace volver quince años atrás, recordando momentos tan dolorosos y amargos.
Pero en fín, así es la vida, y por supuesto cuando pienso en él prefiero recordar los momentos mas entrañables. Lo recuerdo sacando los perros a bañarse al lago, paseando al caballo, llendome a buscar a la parada del autobús cuando se hacía de noche, etc., tantas y tantas pequeñas cosas que me hacen retroceder a mi niñez.
Yo no se si desde donde sea que se va uno despues de la muerte puede llegar a ver o sentir a sus seres queridos, pero si así fuera, solo quiero que sepas papá que nunca te olvidé, de que para mi sigues vivo en mi corazón.
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